– Frontón México, venue que no solo recibe aplausos para pelotaris.
– Las bandas mexicanas, Pressive y Atma fueron las encargadas de abrir la noche.
Bush y Stone Temple Pilots decidieron armar pareja “grungera” para hacer recordar a sus fans latinoamericanos los años en los que la música con guitarras distorsionadas y voces graves dominaban los charts de rock; Brasil, Argentina, Chile, Perú y nuestro país fueron los elegidos por el “Revolución Tour 2019”, y ayer, 24 de febrero, la gira tuvo su presentación final en el Frontón México de la capital del país, un recinto que comienza a ser habilitado para recitales.
Después de un par de bandas nacionales que dejaron que desear, aparecieron los hermanos DeLeo, Eric Kretz y Jeff Gutt en el escenario con “Wicked Garden”, canción que pertenece al álbum debut de la agrupación californiana, Core, disco que hace un par de años celebró su 25 aniversario con una edición especial que incluyó cuatro CDs con la versión original remasterizada y más de dos horas de demos y actuaciones en vivo, incluyendo la presentación en el MTV Unplugged (1993), un vinilo del álbum original y DVD con los videos de sus cuatro sencillos, toda una delicia para sus fans.
El setlist estuvo compuesto por 13 canciones, en poco más de una hora de presentación, destacando que solo tocaron temas de sus tres primeros discos y el más reciente, único con Jeff Gutt en las vocales, el nuevo frontman de la banda que intenta desmarcarse de la imagen de Scott Weiland, el icónico cantante que marcó una época en los noventa.
STP dio muestra de la experiencia y talento cosechado durante tantos años en los escenarios de todo el mundo, y en su quinta presentación en la Ciudad de México sorprendieron con un par de versiones nuevas, sobre todo la de “Plush”, una de sus canciones más representativas, dejando a los fans capitalinos, satisfechos y convencidos de su calidad en vivo.
Al llegar al Frontón México, los asistentes al evento nos preguntábamos cuál sería el orden en que tocarían las bandas, la lógica nos dictaba que por trayectoria, Stone Temple Pilots cerraría, la realidad fue diferente y Bush confirmó porque fueron ellos los encargados de hacerlo, Gavin Rossdale se mantiene como un gran frontman y a sus 53 años está en excelente forma física, con una energía desbordante que contagia a sus compañeros de banda y por supuesto al público.
Los ingleses arrancaron con “Machinehead”, de esa forma mandaron el mensaje a los asistentes de que los próximos 60 minutos vendrían cargados de fuerza y mucha entrega con 12 canciones que revivirían lo mejor de los dos primeros discos, más algunos temas recientes y “Come together”, cover a The Beatles; pendiente quedó “The chemicals between us”, uno de los sencillos más exitosos de Bush.
Destacable que Rossdale hiciera un gran esfuerzo tratando de comunicarse con el público en español, subiendo a la grada mientras cantaba “Let yourself go”, dejándose querer por su público.
Noche redonda del género que marcó una de las décadas más importantes de la historia del rock, con dos representantes que no tuvieron la continuidad esperada en las listas de popularidad mundial, pero que dieron muestra del bagaje acumulado durante todos estos años porque ejecutan de manera perfecta en el escenario, proyectando fuerza y talento hacia el auditorio.