Esta festividad ha evolucionado en México, convirtiéndose en una ocasión para disfrutar con familiares y amigos.
Halloween, celebrado el 31 de octubre, tiene sus raíces en un antiguo festival pagano que marcaba el final de la cosecha. Esta festividad, también conocida como «La Noche de Todos los Santos», se ha transformado en una ocasión en la que las calles de México se llenan de fantasmas, monstruos, brujas y una gran variedad de disfraces, todo producto de la imaginación y creatividad de la gente. Esta fecha se ha consolidado como el momento ideal para disfrutar en familia, con amigos o en pareja.
Influencia global y tradiciones locales
Halloween es muy popular en Estados Unidos, su influencia se ha extendido a muchas partes del mundo, incluida la Ciudad de México. En esta metrópoli y otros estados, es común que las personas salgan a pedir dulces, exhibiendo disfraces inspirados en personajes clásicos del terror y en tendencias actuales.
El origen de Halloween se remonta a la festividad celta de Samhain, que hace más de 2,000 años marcaba el final de la cosecha y el inicio del invierno. Según medios internacionales, el término Halloween es una abreviatura de «All Hallows’ Eve» o «La Noche de Todos los Santos», y se relaciona con las antiguas creencias celtas que pensaban que durante esta noche los espíritus regresaban al mundo de los vivos. Para evitar ser reconocidos por estos fantasmas, los pobladores usaban máscaras, una tradición que ha perdurado a lo largo del tiempo.
La Costumbre de pedir dulces y el origen de las Jack-o’-lanterns
Las tradiciones de Halloween también se desarrollaron en regiones del Reino Unido e Irlanda, donde se solía pedir pequeños panes llamados “pasteles del alma” (soul cakes) a cambio de oraciones, en una práctica conocida como souling. Los adultos, a su vez, recorrían los hogares pidiendo comida y bebida a cambio de canciones y bailes.
Una de las leyendas más famosas de Halloween es la de las Jack-o’-lanterns, que deben su nombre a un hombre llamado Jack. Según la leyenda irlandesa, Jack no podía entrar ni al cielo ni al infierno y fue condenado a vagar por la Tierra con un carbón del infierno para iluminar su linterna, convirtiéndose en «el vigilante nocturno».
Adicionalmente, los inmigrantes africanos y haitianos aportaron creencias vudú que enriquecieron las tradiciones de Halloween, introduciendo simbolismos relacionados con gatos negros, fuego y brujería, que han dado un toque más oscuro a la celebración.
Un evento en evolución
Halloween ha evolucionado con el tiempo, combinando sus raíces paganas con tradiciones cristianas. A medida que los inmigrantes irlandeses y escoceses llevaron sus costumbres a América del Norte en el siglo XIX, la festividad se ha expandido globalmente, siendo ahora un evento que celebra la creatividad y la comunidad, y que recuerda la conexión entre los vivos y los muertos.