La serie Club de Cuervo llegó a su fin, en esta cuarta temporada podremos ver como se cierran las historias de los personajes con los cuales el público se identificó, y quienes tendrán una gran carga de emoción, nostálgia y sobre todo responderán a temas que se tocan desde el primer capítulo, además de risas y lágrimas.
«Para nosotros Netflix se volvió una escuela enorme, para quienes teníamos inquietudes internacionales como productores y empresas. Fuimos aprendiendo para bien en muchos aciertos que íbamos teniendo con nuestro instinto y también con errores.
«Siempre trabajamos como hermanos para un mismo fin, aprendiendo, exigiendonos, con orden y respeto, lo que nos llevó a entregar este producto al público y ser un ejemplo para latinoamérica en general», Apuntó Leonardo Zimbrón, productor de Club de Cuervos.
Mientras, el también productor Mark Alazraki, comentó sentirse muy orgulloso por producir y concluir con éxito la primera serie en español, con personajes que conectaron con todos.»Hicimos un gran recorrido y una gran familia, por lo que no puedo dejar de agradecer», apuntó
Y el actor Aldo Escalante conocido en Cuervos como Carmelo externó que la amistad que destaca con Hugo Sánchez, fue algo que agradó mucho a la audiencia y el formar parte de esta nueva forma de hacer contenido fue muy halagador.
«Es la primera serie internacional de Netflix, que abrió camino para que mucha gente más, tenga nuevas posibilidades de expresar».
Asimismo, Tomás Goros (Armando Cantú), destacó que Club de Cuervos fue un proyecto que rompió todas las predicciones. Es decir, es un proyecto que cree en nuestra cultura e idiosincrasia con un lenguaje mexicano, con un tema como el fútbol, que es muy explotable.
«La historia nos demostró que la gente quería ver calidad, cosas reales, distintas, con talento, tanto actoral, con un lenguaje cinematográfico coloquial, con actores y no modelos». Enfatizó
Finalmente, Los protagonistas, Mariana Treviño y Luis Gerardo Méndez se dicen contentos de terminar con una trama muy querida por la gente, pero a la vez dolorosa porque tendrán que dejar ya a los personajes que hicieron por mucho tiempo (Isabel y Chava Iglesias).
En el caso de Mariana dejar de interpretar a una mujer que se convirtió un parteaguas en su carrera es difícil.
«Está cuarta temporada es la más divertida, conmovedora y los últimos tres capítulos hay que verlos con Kleenex», puntiualizô Luis Gerardo Méndez.